miércoles, 12 de mayo de 2010

Cienciología



La cienciología es un sistema de creencias y enseñanzas, originalmente propuesto como una filosofía laica en 1952 por L. Ron Hubbard, y posteriormente reorientado desde 1953como una «filosofía religiosa aplicada».


También es considerada como una organización espiritual con objetivo económico, que ofrece cursos de mejoramiento personal y autoayuda a precios generalmente altos, la Cienciología postula que solo los upstat (personas exitosas) pueden recibir el procesamiento necesario (cursos), por lo que solo aquellos con el dinero necesario pueden acceder a los cursos de ayuda, las personas down stat (personas no exitosas) y que precisan hacer los cursos al no tener el dinero necesario son invitadas a formar parte del personal de la organización, donde se les entregan los cursos de manera gratuita a cambio de trabajo y la firma de un contrato que indica que si desean retirarse como parte del personal de la Cienciología, deberán pagar el valor de los cursos que tomron de manera gratuita o serán desterrados de la organización, lo cual genera sentimientos contrarios al querer dejar de trabajar para la organización sin dejar la Cienciología.



Creencias y prácticas


Las doctrinas de la Cienciología fueron establecidas por Hubbard durante cerca de 33 años desde 1952 hasta su muerte en enero de 1986 y difundidas en forma de miles de conferencias, libros, ensayos y políticas. La mayoría de los principios básicos de la Cienciología se presentaron durante los primeros 15 años de su existencia, dedicando posteriormente Hubbard la mayor parte de su tiempo a los más esotéricos niveles superiores (o «Tecnologías Avanzadas») del sistema de creencias cienciológico. La Iglesia describe sus acciones como una mejora y ampliación de la factibilidad y uso de estos principios.


Según la doctrina de la Cienciología, Xenu (también Xemu) era el dictador de la "Confederación Galáctica," que hace 75 millones de años trajo miles de millones de personas a la Tierra en naves espaciales parecidas a aviones DC-8. Seguidamente, los desembarcó alrededor de volcanes y los aniquiló con bombas de hidrógeno. Sus almas se juntaron en grupos y se pegaron a los cuerpos de los vivos, y aún siguen creando caos y estragos.


Los cienciólogos lo conocen como "El Incidente II", y las memorias traumáticas se asocian a éstos como la "Pared de Fuego" o "La implantación de R6". La historia de Xenu es una pequeña parte de la gran gama de creencias de la Cienciología sobre civilizaciones extraterrestres y sus intervenciones en acontecimientos terrenales, en conjunto descritos como una obra de ciencia ficción sobre los viajes en el espacio por L. Ron Hubbard, escritor de ciencia ficción y fundador de la Cienciología.


Hubbard reveló detalladamente esta historia a los integrantes del nivel "OT III" en 1967. En la historia de Xenu se dio la introducción del empleo del volcán como un símbolo común de la Cienciología y Dianetica, que persiste hasta nuestros días.


Las críticas a la Cienciología a menudo utilizan la historia de Xenu en contra suya. La Cienciología ha tratado infructuosamente de mantener la historia de Xenu confidencial. Los críticos demandan que la revelación de la historia es de interés público, considerando el alto precio exigido para alcanzar el nivel "OT III". La Cienciología sólo enseña esta doctrina a los miembros que han contribuido con grandes cantidades de dinero a la organización.


La Cienciología evita hacer mención de Xenu en declaraciones públicas y ha hecho un esfuerzo considerable a mantener la confidencialidad, incluyendo acciones legales basadas en los derechos de propiedad intelectual y en el secreto comercial. A pesar de esto, mucho material sobre Xenu se ha filtrado al público.


Las creencias centrales de la Cienciología son que cada persona es un ser espiritual inmortal (llamado thetan) que posee una mente y un cuerpo, y que las personas son básicamente buenas. La vida que cada uno debería llevar es la de educación, conocimiento y mejora espiritual y ética continua, para poder así ser feliz y alcanzar la salvación definitiva, así como ser más efectivos en la creación de un mundo mejor. La Cienciología afirma ofrecer metodologías específicas para ayudar a la persona a conseguir esto.


Otro principio básico de la Cienciología es que hay tres componentes básicos interrelacionados (e intrínsecamente espirituales) que son el verdadero fundamento del «estado de vivir» (livingness) exitoso: afinidad, realidad (o acuerdo) y comunicación, que se equiparan al entendimiento. Hubbard llamó a esto «triángulo ARC». Los cienciólogos utilizan el ARC para mejorar sus vidas, basándose ante todo en la creencia de que elevar un aspecto del triángulo incrementa los otros dos.


En un intento de clarificar el concepto de mentes consciente, subconsciente e inconsciente, Hubbard escribió que la mente del hombre está estructurada en dos partes: la «mente analítica» y la «mente reactiva». Describió la mente analítica como la parte positiva, racional y calculadora, mientras la reactiva, de acuerdo con él, funciona sobre la base de estímulos y respuestas. Los cienciólogos creen que la mente reactiva es la raíz de la angustia individual, así como el origen de la aberración de la humanidad y su incapacidad para crear sociedades duraderas, prósperas y saludables


La metodología central de la Cienciología se denomina «auditación» (de la raíz latina audiv-, «escuchar») y consiste en una comunicación personalizada con un «auditor» o ministro de esta iglesia. El auditor ayuda a la persona a llegar a comprenderse a sí mismo y a desentrañar la parte reactiva de su mente, es decir, «cargas» emocionales, incidentes traumáticos específicos, sus propias transgresiones éticas y malas decisiones del pasado que tienden a encerrarlo en una vida que no queda totalmente bajo su propio control.


La iglesia de la cienciología sostiene que su finalidad es un mundo sin guerra, crímenes ni locura, donde la gente buena y decente tenga la libertad de alcanzar sus metas.


Conforme un individuo avanza en la jerarquía dentro de la organización, demostrando estar más comprometido con ella, se le van revelando detalles sobre las creencias de la cienciología. Los niveles de esta jerarquía se llaman niveles OT. En los más avanzados de estos niveles les es revelado la existencia de Xenu. Xenu sería un emperador alienígena que dio inicio a una serie de eventos fantásticos que concluirían por explicar cómo los seres humanos son racimos de almas extraterrestres apiñadas dentro de cuerpos ajenos. Cada una de estas almas es llamada, en inglés, body thetans.



De los muchos nuevos movimientos religiosos que surgieron durante el siglo XX, la Cienciología ha sido uno de los más controvertidos desde prácticamente su fundación. La Iglesia de la Cienciología ha entrado en conflicto con los gobiernos de varios países (incluyendo los Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Bélgica y Alemania) en numerosas ocasiones a lo largo de los años, y ha sido denunciada por estafa e intento de infiltrar las instituciones públicas repetidamente (en Bélgica, Alemania y Francia).


Otro punto de controversia es la infiltración de la Cienciología en la Hacienda Pública de los Estados Unidos en la llamada «Operación Blancanieves». Once cienciólogos de elevado rango, incluida Mary Sue Hubbard (esposa de L. Ron Hubbard), fueron condenados a prisión por su participación en esta infiltración.


La actual controversia entre la Iglesia de la Cienciología y sus críticos incluye los siguientes aspectos:



  • Alegaciones de actividades criminales de la Iglesia de la Cienciología y sus miembros.

  • Activismo de Cienciólogos en contra de la psiquiatría, y principalmente las drogas psiquiátricas como Prozac, Haldol, Paxil y Ritalin.

  • Denuncias de lavado de cerebro y control mental.

  • Política de desconexión del mundo.

  • Acusaciones de que L. Ron Hubbard creó una religión para lucrarse.

  • Muertes misteriosas de cienciólogos.

  • Acciones planificadas de la Cienciología contra sus críticos y enemigos.


    Cienciología en realidad no es ninguna iglesia, sino una organización científica. Cienciología funciona como organización civil y no como religión.

    Dianética y Cienciología permiten al hombre ser libre a través de sus conocimientos y técnicas de salud mental.

    "Cualquier cosa que produzca el borrado de engramas de su lugar y su rearchivo como experiencia es útil y legítima, incluya lo que incluya" esto es aplicable a la Dianetica y Cienciologia, y cada quien toma lo que es mejor.





Contradicciones entre la biblia y la iglesia

AQUI TIENES LO QUE LA IGLESIA CATOLICA ENSEÑA, COMPARADO CON LO QUE LA BIBLIA DICE:
(Se ha usado aqui palabras propias, el texto original del catecismo catolico puedes encontrarlo aquiaqui)

La salvación, la misericordia, la justificación

La justificación se recibe primero por el bautismo. (1262-1274).
La justificación se recibe por medio de la fe, sacramentos y buenas obras (1247-1249).
El hombre es justificado por fe sin las obras de la ley (Ro.3:28). Dios justifica al pecador quien cree (Ro. 4:5). Las buenas obras son el resultado de la salvación, su resultado es el deseo de hacer buenas obras.

La salvación de los resultados del pecado es un proceso que dura toda la vida (161-162, 1254-1255).
La salvación es un suceso unico y de una vez, cuando el pecador acepta a Jesucristo como su reconciliador. En ese momento Dios nos declara justificados. (Ro. 5:9).

El hombre consigue su salvación junto con la gracia, por medio de la fe, buenas obras y participación en los sacramentos de la iglesia (183, 1129, 1815, 2002).
La salvación es por medio de la fe, por la gracia, no por obras (Ef. 2:8,9).

La gracia se gana con buenas obras (2010, 2027).
La gracia es un regalo gratis - sin obras ni mérito (Ro.11:6).

El sacerdote puede perdonar los pecados actuando como un juez (1442, 1461).
Solo Dios puede perdonar los pecados (Mr. 2:7).

Aunque el pecado se confiesa y es perdonado, el castigo temporal según la cantidad de los pecados no sale (la enseñanza de purgatorio) (1472-1473).
El purgatorio despues de la muerte se necesita, para que el pecado sea reconciliado por completo y que el alma sea limpia (1030-1031).
Dios perdona los pecados completamente (Col.2_13, Is. 43:25).
La Biblia no enseña acerca del purgatorio - Jesucristo redimió todos los pecados en la cruz (Heb. 1:3).

Las facilidades especiales declaradas por la iglesia ayudan al pecador acortar el tiempo del purgatorio (1471-1473). (Los muertos también pueden recibir la facilitación si p.ej. un familiar vivo lo consigue con su obra. Estas obras incluyen p.ej. un viaje de peregrinación declarado por la iglesia a un cierto destino).
Jesús salvó a los que creen en Él por su sangre de una vez - no se necesita declaraciónes eclesiasticas adicionales (Ap. 1:5, Heb. 9:12,14,28).

Nadie puede decir por cierto que esta salvo para la vida eterna (1036, 2005).
Un creyente sabe que es un heredero de la vida eterna por la promesa de la Palabra (1.Jn. 5:13). (Un testimonio interno de Espíritu Santo que somos hijos de Dios sigue la conversión.)

La vida eterna es un premio merecido (1821, 2010).
La vida eterna es un regalo gratis dado por Dios (Ro. 6:23).

La Iglesia Catolica es absolutamente necesariaa como intermediadora de la salvación (846).
La salvación es unicamente por medio de Cristo Jesús - solo hay un mediador (He. 4:12, 1 Tim. 2:5).

La misa - la comunión

En la misa el pan y el vino se convierten en el cuerpo y la sangre verdadera de Jesús (1373-1377).
Jesús esta verdaderamente presente en cuerpo y sangre en el pan de la misa y en el vino (1374, 1377).
El pan y el vino son el simbolo del cuerpo y sangre de Jesús (1 Cor.11:23-25).
Cristo esta en el cielo (Heb. 10:12,13).

El pan y el vino santificado ayudan a conseguir la vida eterna (1392, 1405, 1419).
El pan y el vino son ejemplo que nos ayuda a recordar lo que Cristo hizó (Lc. 22:19).

La Eucaristía es un sacrificio porque representa (= hace presente) el sacrificio de la cruz (repetido) (1085, 1365-1367).
El sacrificio de la cruz es un suceso historico que fue una sola vez, que no se repite. (Mr. 15:21-41).

El sacrificio de la cruz se repite en el sacrificio de la misa (1323, 1382).
El sacrificio de la cruz esta cumplida (Jn. 19:30, Heb. 9:28).

La misa es un sacrificio sin sangre, por lo cual se expia pecados de los vivos y de los muertos (1367, 1371, 1414).
Sin derramamiento de sangre no hay perdón de pecados (Heb. 9:22, Lev. 17:11).

La iglesia continua sacrificando a Cristo (en la misa) para la salvación del mundo (1323, 1382, 1405, 1407).
La misión de la iglesia de Cristo es declarar el sacrificio del Señor, que es la base de la salvación (1 Cor. 11:26).

La virgen Maria

Maria era libre del pecado original desde su nacimiento (490-492).
Maria, "completamente santa", vivia una vida sin pecar (411, 493).
Maria, heredera de Adan, nació en pecado como todos (Sal. 51:5, Ro. 5:12).
Maria era pecadora, solo Dios es Santo (Lc. 18:19, Ro. 3:23, Ap. 15:4).

Maria era virgen antes y despues del nacimiento de Jesús y también durante el nacimiento (496-511).
Maria era virgen hasta el nacimiento de Cristo (Mt. 1:25). Mas tarde dió a luz otros hijos (Mt. 13:55-56, Sal. 69:9).

Maria es Madre de Dios (963, 971, 2677).
Maria era madre terrenal de Jesús (Jn. 2:1).

Maria es Madre de la Iglesia / congregación (963, 975).
Maria es miembro de la iglesia de Cristo (He. 1:14, 1 Cor. 12:13,27).

Maria es Salvadora, tenia parte en la obra salvadora de Cristo (618, 964, 968, 970).
Solo Cristo es Salvador, solo Él sufrió y murió reconciliando los pecados (1 P. 1:18-19).

Maria fue tomada al cielo sin ver la muerte (966, 974).
Maria murió y su cuerpo se convirtió en polvo (Gn. 3:19).

Maria es intermediadora y ora por nosotros y podemos traerle nuestras preocupaciónes y pedidos (968-970, 2677).
Jesús es el unico intermediador entre nosotros y Dios (1 Tim. 2:5, Jn. 14:13-14, 1 P. 5:7).

Nuestra confianza se ensancha para entregarle desde ahora, "la hora de nuestra muerte" (2677).
En la hora de nuestra muerte nuestra confianza y esperanza esta solo en Cristo (Ro. 10:13, He. 4:12).

Dios ha elevado a Maria "la Reina del cielo y la tierra". A ella le pertenece la alabanza (966, 971, 2675).
Solo el nombre del Señor hay que alabar, solo Él esta elevado sobre el cielo y la tierra (Sal. 148:13).

La autoridad

Pedro era la cabeza de los apostoles (552, 765, 880).
Cristo era y es la cabeza de los apostoles y de toda su congregación (Jn. 13:13).

Los obispos son herederos de los apostoles y sus seguidores (861-862, 938).
Apostoles no tienen seguidores - los apostoles fueron testigos de la muerte de Cristo (He. 1:21-22).

Papa es el heredero de Pedro en la administración de la iglesia (882, 936).
Pedro no tiene heredero en la Biblia.

Papa como el mas alto y los obispos dirigen la iglesia mundial (883, 894-896).
Cristo dirige su congregación en el mundo (Col 1:18).

El oficio de interpretar auténticamente la palabra de Dios, oral o escritura, ha sido encomendado sólo al Magisterio vivo de la Iglesia (los obispos en comunión con papa) (85-87).
El Espíritu Santo es el profesor de la congregación (Jn. 14::26, 16:13, 1 Jn. 2:27).

La Iglesia Catolica es el interprete infalible de la Palabra (890-891, 2034-2035).
Las Escrituras en si tienen la explicación y la infalible interpretación (He. 17:11).

Solo la iglesia puede y tiene el derecho de explicar la Palabra (85, 100, 939).
Cada cristiano, con la ayuda del Espíritu Santo, tiene derecho y puede interpretar la Palabra (He. 17:11, 1 Cor. 2:12-16).

Papa es una autoridad infalible en su enseñanza (891).
Solo Dios es infalible y perfecto (Prov.21:30, Sal. 8:4-5, 19:8-9).

Las Escrituras y la tradición de la iglesia juntos, son la Palabra de Dios (81, 85, 97, 182). Ellos juntos son la base de la enseñanza de la fe de la Iglesia (80, 82).
Solo las Escrituras: AT y NT son la Palabra de Dios (Jn. 10:35, 2 Tim. 3:16-17, 2 P. 1:20-21). La tradición es palabra del hombre y su base no esta en la Palabra (Mr. 7:1-13).
La Palabra es la base de la enseñanza de la fe de la iglesia (Mr. 7:7-13, 2 Tim. 3:16-17).

Jesús según la investigación histórica

Jesús según la investigación histórica

A diferencia de lo que ocurre con otros personajes de la Antigüedad, pero al igual que sucede con otros muchos, no existen evidencias arqueológicas que permitan verificar la existencia de Jesús de Nazaret. La explicación principal que se da a este hecho es que Jesús no alcanzó mientras vivía una relevancia suficiente como para dejar constancia enfuentes arqueológicas, dado que no fue un importante líder político, sino un sencillo predicador itinerante.Si bien los hallazgos de la arqueología no pueden ser aducidos como prueba de la existencia de Jesús de Nazaret, sí confirman la historicidad de gran número de personajes, lugares y acontecimientos descritos en las fuentes.

Papiro P52, el más antiguo manuscrito conocido del Nuevo Testamento, que contiene un breve fragmento del Evangelio según San Juan. Mayoritariamente datado hacia 125, se considera actualmente el documento más antiguo conservado en relación con Jesús de Nazaret.

Por otro lado, Jesús, como otros muchos destacados dirigentes religiosos y filósofos de la Antigüedad, no escribió nada, o, al menos, no hay constancia alguna de que así haya sido. Todas las fuentes para la investigación histórica de Jesús de Nazaret son, por lo tanto, textos escritos por otros autores. El más antiguo documento inequívocamente concerniente a Jesús de Nazaret es el llamado papiro P52, que contiene un fragmento del Evangelio según San Juan y que data, según los cálculos más extendidos, de hacia 125, es decir, aproximadamente un siglo después de la fecha probable de la muerte de Jesús (hacia el año 30).

Si bien los testimonios materiales referentes a la vida de Jesús son muy tardíos, la investigación filológica ha logrado reconstruir la historia de estos textos con un alto grado de probabilidad, lo que arroja como conclusión que los primeros textos sobre Jesús (algunas cartas de Pablo) son posteriores en unos veinte años a la fecha probable de su muerte, y que las principales fuentes de información acerca de su vida (los evangelios canónicos) se redactaron en la segunda mitad del siglo I. Existe un amplio consenso acerca de esta cronología de las fuentes, al igual que es posible datar algunos (muy escasos) testimonios acerca de Jesús en fuentes no cristianas entre la última década del siglo I y el primer cuarto del siglo II.

En el estado actual de conocimientos acerca de Jesús de Nazaret, la opinión predominante en medios académicos es que se trata de un personaje histórico, cuya biografía y mensaje fueron significativamente alterados por los redactores de las fuentes, que actuaron movidos por intereses religiosos. Existe, sin embargo, una minoría de estudiosos que, desde una crítica radical de las fuentes, consideran probable que Jesús no fuese un personaje histórico real, sino una entidad mítica, similar a otras figuras objeto de culto en la Antigüedad.

Archivos II

El archivo hoy:



Algunos volúmenes del fondo
del Archivo de la Nunciatura Apostólica
en Mónaco de Baviera


Por voluntad del Sumo Pontífice Juan Pablo II, a partir del 16 de febrero de 2003 quedan a disposición de los investigadores los documentos conservados en los archivos de la Sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado (ya Congregación para los Asuntos Eclesiásticos Extraordinarios), así como los conservados en los archivos de la Nunciatura Apostólica de Mónaco de Baviera y Berlín relativos a las relaciones entre la Santa Sede y Alemania durante el periodo 1922-1939; asimismo se ha anunciado la apertura para su consulta de la documentación del pontificado de Pío XI (hasta febrero de 1939) para el próximo año 2006.

Hoy, toda la documentación conservada en el Archivo Secreto Vaticano asciende a ochenta y cinco kilómetros lineares de estanterías con más de seiscientos treinta fondos distintos (entendiéndose por fondo un conjunto documental con carácter unitario) y está en continuo aumento (cada año las distintas representaciones pontificias en el mundo, la Secretaría de Estado y las Congregaciones depositan cientos de unidades en el Archivo) y cubre un arco de tiempo continuo de más de 800 años de historia (desde el 1198 en adelante, con documentos esporádicos de los siglos X y XI). El documento más antiguo conservado en el Archivo Vaticano es el famoso Liber Diurnus Romanorum Pontificum, antiguo libro de fórmulas de la cancillería pontificia del siglo VIII.

Esto es el Archivo Secreto Vaticano aproximadamente en cifras. Se trata de un archivo que va más allá de los confines geográficos de lo que fue el dominio temporal de la Iglesia, principal institución productora y destinataria en el pasado de los papeles que se conservan, extendiéndose no sólo al Orbis christianus, sino también más allá (el Archivo conserva, por ejemplo, los documentos más antiguos escritos en mongol que datan de la segunda mitad del siglo XIII).
Los depósitos y lugares del Archivo han sido ampliados considerablemente a lo largo de los siglos.



Uno de los pasillos de los nuevos espacios del Archivo Secreto Vaticano encargado
por el papa Montini e inaugurado el 18 de octubre de 1980 por el pontífice Juan Pablo II.


El Archivo Secreto Vaticano dispone actualmente de dos salas de estudio que acogen a aproximadamente 1.500 estudiosos de más de 60 países cada año, una sala de índices, una biblioteca interna, un taller de conservación, restauración y encuadernación, un taller para la restauración y el estudio de sellos, un laboratorio fotográfico y de reproducción digital, un centro de elaboración de datos y un laboratorio informático, un servicio administrativo (secretarías y economato). El personal científico (oficiales) y auxiliar sigue una carrera interna establecida y está sujeto a las normas de un Estatuto específico y de un Reglamento del Archivo aprobados por el Pontífice.



Sala León XIII


El Archivo Vaticano tiene anexa la Escuela Vaticana de paleografía, diplomática y archivística, instituida por León XIII en 1884.

Algunos documentos que estan en el archivo


• Documentación sobre el cristianismo primitivo, que incluye estudios sobre los rollos del Mar Muerto.

• El juicio de los Templarios. Volumen de 1309 acerca del proceso a los caballeros de la Orden del Temple. Se trata de una copia, no de la edición original, pero se la considera absolutamente fidedigna y realizada inmediatamente a la redacción del original.

• Cisma de Occidente (1378-1417), con años en los que hubo tres Papas a la vez, cada uno con sus misterios, sus secretos, sus archivos y documentos confidenciales.

• La Bula de Inocencio VII (1484), con la que promovía la caza de brujas.

• Todos los libros prohibidos expresamente por el Vaticano a través de su Índice; libros que, lógicamente, se han leído y archivado. El Índice surgió a raíz de la Institución de la Sagrada Congregación del Santo Oficio (1542), testamento que instauró la Inquisición a semejanza de la ya establecida en España. Sin embargo, es necesario aclarar que la prohibición de impresión, copia y lectura de ciertos libros comenzó con el Concilio de Nicea donde, por ejemplo, se prohibió y quemó el Thalia de Arrio.

• Toda la documentación sobre la reforma del calendario romano (del que hoy nos servimos) promovida por Gregorio XIII en 1582.

• Gran cantidad de material con temáticas “normales” (eclesiástica, civil y política) y, sin duda, otra buena parte con temas paranormales. Muchos investigadores (entre ellos, Huc de Sant Joan de Mata) coinciden en que los Archivos Secretos con, tienen muchísima documentación sobre la fenomenología para normal y, particularmente, sobre parapsicología. Lógicamente, fenómeno de ese tipo registrado, por ejemplo, en el siglo X, no S expondría como “fenómeno parapsicológico”, sino como anatema, o milagro. En los siglos posteriores, el mismo fenómeno sería vinculado a la brujería.

• Toda la documentación sobre Giordano Bruno (siglo XVI) dominico italiano al que se le enjuició por heterodoxia en un proceso que duró siete años. De éste último hecho, sólo se conserva un sumario de 55 páginas que fue hallado en 1940.

• Dentro del sector catalogado como “Archivo de miscelánea”, se encuentra todo el proceso acerca de la monja de Tercera Orden de Santo Domingo, Cristina de Rovales (llevado a cabo en el siglo XVI), que da cuenta de posesiones diabólicas estigmas, apariciones y fenomenología que hoy se considera puramente parapsicológica, como la levitación y la telepatía.

• Textos procedentes de países no cristianos visitados por misioneros. Por ejemplo, en el siglo XVII, los jesuitas que encontraban misionando en China mandaron una cantidad verdaderamente asombrosa de material.

• Documentos acerca de el Juicio de Galileo (Siglo XVII)

• Cartas de Pío XII que develan datos de la relación Vaticano-Hitler.

• El pergamino de absolución de Clemente V a la Orden del Temple (agosto de 1308)

• Carta autógrafa de Miguel Ángel al obispo de Cesena (enero de 1550)

• Actas del proceso contra el científico Galileo Galilei (desde 1616 hasta 1633)

• La solicitud de nulidad matrimonial de Enrique VIII, que daría origen al Anglicanismo.

Algunos documentos que pueden verse online:




DEL EMPERADOR JUAN COMNENO II
A CALIXTO II SOBRE LA UNIÓN
DE LAS IGLESIAS

Constantinopla, junio de 1139



Rollo de pergamino, 3975 x 365 mm., compuesto por ocho pergaminos; escritura áurea sobre pergamino purpúreo y firma imperial en rojo

ASV, A.A., Arm. I-XVIII, 402

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PERGAMINO DE CHINON
ABSOLUCIÓN DEL PAPA CLEMENTE V
A LOS JEFES DE LA ORDEN TEMPLARIA

Chinon, diócesis de Tours, 17-20 de agosto de 1308



Formato original de un único folio de pergamino de grandes dimensiones
(700 x 580 mm.), originariamente con sellos pendientes de los tres legados apostólicos que formaban la Comisión apostólica especial ad inquirendum nombrada por Clemente V: Berenger Frédol, cardenal sacerdote del título de los Santos Nereo y Achilleo y sobrino del papa, Étienne de Suisy, cardenal sacerdote de S. Ciriaco in Therminis, y Landolfo Brancacci, cardenal diácono de S. Angelo

ASV, Archivum Arcis, Arm. D 217

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CARTA AUTÓGRAFA
DE MIGUEL ÁNGEL BUONARROTI
AL OBISPO DE CESENA

Roma, enero de 1550



Papel, 290 x 212 mm.
En el dorso por una mano de la época: † 1550, dì ... (sic) di gennaio.
Di Michelagnolo Buonarruoti. A monsignor di Cesena

ASV, Segr. Stato, Principi, 16, f. 484r


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«LUNARIO NOVO» DEL 1582:
LA REFORMA GREGORIANA DEL CALENDARIO

Roma, Appresso Vincentio Accolti, 1582



Volumen de papel, de 300 x 225 mm., 405 folios,
encuadernado en pergamino; en la parte anterior:
fasciculus primus divisio tertia Additorum Ad Caps. XV, Armar. XV n° 4,
sive volumen secundum scriptorum quae similiter sunt
a Gregorio XIII sua manu vel illustrata vel indicata. MDCXXVII

ASV, A.A., Arm. I‑XVIII, 5506, f. 362r

Ver documento



ACTAS DEL PROCESO
CONTRA GALILEO GALILEI

Roma, 1616‑1633



Volumen de papel, 338 x 225 mm., 228 folios:
encuadernación moderna en cartón verde, con el dorso de pergamino

ASV, Misc., Arm. X, 204, ff. 84r, 207r

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CARTA DE LA EMPERADORA CHINA
ELENA NINGSENTSESO, DE LA DINASTÍA MING,
AL PAPA INOCENCIO X

s.l., 4 de noviembre de 1650



Documento de seda, 920 x 520 mm., laterales bordados en oro;
impresión de sello imperial de tinta roja

ASV, A. A., Arm I‑XVIII, 1790

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Visita Virtual al archivo:


Visita Virtual al Archivo (Requiere QuickTime)

Fuentes:


Fuente "Los Archivos Secretos del Vaticano"
Fuente "El archivo ayer"
Fuente "El archivo hoy"
Fuente "Algunos documentos que estan en el archivo"

Archivos I

El archivo ayer:



Vista de la segunda sala del «piso noble»
con el busto marmóreo de padre Agustín Theiner,
prefecto del Archivo Secreto Vaticano desde 1855 hasta 1870.
Sobre la puerta, el escudo del cardenal Scipione Borghese Caffarelli, bibliotecario de 1609 a 1618


El moderno archivo de la Santa Sede nace por iniciativa de Pablo V Borghese aproximadamente en 1610, aunque las raíces de su historia se remontan a tiempos mucho más lejanos y están relacionadas con el origen, naturaleza, actividad y desarrollo de la Iglesia romana. Desde los tiempos de los Apóstoles, los papas conservaban cuidadosamente los escritos relativos al ejercicio de su actividad. El conjunto de los mismos se conservaba en el scrinium Sanctae Romanae Ecclesiae, que normalmente siguió a los papas hasta sus distintas residencias; sin embargo, la fragilidad del papiro, utilizado habitualmente en la cancillería pontificia hasta el siglo XI, los traslados y los cambios políticos provocaron la pérdida de casi todo el material archivístico anterior a Inocencio III.

Con el papel central que asumió el romano pontífice y su curia desde el siglo XI en adelante, así como con la multiplicación de sus oficinas, aumentó también el número de archivos y en el siglo XV los documentos más valiosos se colocaron en Castel Sant’Angelo. Tras varios proyectos para crear un archivo central de la Iglesia, Pablo V ordenó trasladar a las tres salas adyacentes a la Biblioteca Secreta (las llamadas Sale Paoline) registros de bulas y breves, libros de la Cámara, así como colecciones de documentos redactados hasta el pontificado de Pío V incluido. De este modo nació un nuevo archivo «pro privata Romanorum pontificum commoditate» y «ad publicam studiorum utilitatem» compuesto por un total de poco más de tres mil unidades y cuya parte más importante eran los registros de bulas desde Inocencio III en adelante (Registra Vaticana). Este conjunto de documentos recibió el nombre de Archivo Secreto Vaticano.
A lo largo del siglo XVII el Archivo conoció considerables ampliaciones, sobre todo en tiempos de Urbano VIII Barberini (bulas de Sixto IV y Pío V; los papeles de la Secretaría de Breves desde Alejandro VI hasta Pío V, la vasta documentación contenida en los Armaria XXXIX-XLV, libros de la Cámara Apostólica procedentes de Aviñón, donde habían permanecido desde el final del cisma, los papeles del Concilio de Trento); así como en tiempos de Alejandro VII, que destinó un piso de los Palacios Vaticanos a la correspondencia diplomática de la Secretaría de Estado.



Segundo piso superior del Archivo Secreto Vaticano
donde se conserva, en armarios del siglo XVII,
la correspondencia diplomática de la Santa Sede
constituida por el antiguo archivo de la Secretaría de Estado
y por la documentación de varias legaciones pontificias


En la primera mitad del siglo XVIII, durante las prefecturas de Pietro Donnino De Pretis y Filippo Ronconi, los papeles conservados en el archivo fueron ordenados por primera vez de tal manera que en el caso de muchos fondos sigue siendo válida hasta hoy. Entre 1751 y 1772 la figura de Giuseppe Garampi domina la historia del Archivo, quien, entre otras cosas, es el principal artífice del famoso Fichero que lleva su nombre. Éste realizó o solicitó numerosas adquisiciones, depósitos y transferencias de material archivístico (fondos Albani, Carpegna, Pío, así como 1.300 libros de cámara).

En 1783 se transportó al Vaticano todo lo que había quedado en Aviñón, como por ejemplo la serie de registros de bulas conocidos como Registra Avenionensia; en 1798 se trasportó también el archivo de Castel Sant’Angelo (Garampi ya había aunado ambos cargos de archivista del Archivo Secreto Vaticano y de Castel Sant’Angelo), el cual entre otras cosas contenía 81 documentos con sellos de oro (tipo lámina de oro, oro macizo, estuches dorados y plateados) entre los que destaca por su valiosa antigüedad un diploma de Federico Barbarroja del año 1164.
En 1810 los archivos de la Santa Sede fueron trasladados por orden de Napoleón a París, ciudad de la que volvieron con numerosas pérdidas entre 1815 y 1817



Salida de Roma de un convoy de obras de arte y material documentario
del Archivo Secreto Vaticano rumbo a París (grabado anónimo)


y convertirse así en uno de los centros de investigaciones históricas más importantes del mundo.

En 1892 se trasladó del Palacio Lateranense al Archivo Vaticano gran parte del archivo de la Dataría Apostólica con los registros de bulas de la Cancillería desde 1389 (Registra Lateranensia, el antiguo Archivum Bullarum) y los registros de súplicas desde 1417. En el siglo XX, además de la parte moderna del archivo de la Secretaría de Estado, llegaron los archivos de la Secretaría de Breves, del Tribunal de la Rota Romana, de distintas congregaciones (Consistorial, de los Obispos y Clérigos Regulares, de los Sacramentos, de los Ritos, del Concilio, etc.), del Palacio Apostólico, del Concilio Vaticano I, de varias Nunciaturas (sobre todo a partir de 1971) y de algunas familias patricias romanas ligadas a la historia de la Santa Sede (Borghese, Boncompagni, Rospigliosi, Ruspoli, Marescotti, Montoro, etc.).
En el año 2000 se depositó todo el archivo del Concilio Vaticano II, que Pablo VI abrió a los estudiosos derogando el límite establecido para la consulta de los documentos de los archivos de la Santa Sede (enero de 1922, muerte de Benedicto XV).



Bula «Humanae salutis» de Juan XXIII
para la convocación del Concilio Ecuménico Vaticano II (25 de diciembre de 1961)
ASV, Instr. Misc. 7934, ff. 1v-2r

Libros Apocrifos y cartas polemicas



Por último, el archivo guarda documentos importantes para la historia como son los primeros evangelios prohibidos o los que hasta la fecha son considerados apócrifos y no son conocidos ni por investigadores ni estudiosos, así como diversas actas firmadas, cartas y documentos de la diplomacia vaticana, entre éstas las más importantes la petición de la anulación matrimonial del Rey Enrique XVIII de Inglaterra cuya negación provocó el rompimiento de las relaciones entre el Vaticano y Gran Bretaña, así como documentos del Papa Pío XII y sus presuntos lazos con el nazismo en la Segunda Guerra Mundial. Es más, el último investigador que tuvo el permiso para investigar los archivos fue el historiador John Cornwell, quien con la excusa de escribir un libro biográfico del citado padre publicó el libro titulado El Papa de Hitler, hecho que provocó polémica dentro de la Iglesia Católica, a partir de esa fecha, el Vaticano consideró que los documentos podrán ser solicitados luego de 70 años de ocurridos los hechos a investigar.

Datos a tomar en cuenta

Como dato extra se sabe que los archivos completan cerca de 50 kilómetros de estanterías, comprendidos por más de 50 mil volúmenes de los cuales miles aún se encuentran sin clasificar, es decir, que su contenido aún no ha sido revisado ni siquiera por los propios miembros del Vaticano incluidos el propio Pontífice.

Ali Agca y Juan Pablo II

Alí Agca y Juan Pablo II

Otro de los principales documentos estaría referido al sucesor de Juan Pablo I, el llamado Papa del Pueblo, Juan Pablo II.

Luego de sufrir el atentado del 13 de mayo de 1982 a manos del terrorista turco Alí Agca, Juan Pablo II, siete meses después, tuvo un encuentro de 18 minutos con su atacante.

El tema de la conversación entre ambos personajes es hasta el día de hoy un misterio, es más, el propio Papa luego de su entrevista declaró a los medios de prensa que aquel encuentro era “un secreto que no me pertenece y que debo respetar". Esto indicaba que Juan Pablo II le dio a la plática categoría de Confesión, es decir, a partir de ese momento era imposible que fuera revelado al público.

Sin embargo, y según fuentes oficiales, el Sumo Pontífice le habría relatado al entonces Cardenal y hombre de confianza, Luigi Poggi, los pormenores de dicha conversación. A su vez, Poggi habría redactado un informe en donde detallaba los puntos tocados en esa extraña reunión. El documento actualmente se encuentra en los archivos vaticanos y tiene la categoría de Secreto Pontificio, es decir, que nadie, salvo el Papa, puede leer, publicar, difundir o dar a conocer el citado archivo al público.

Sin embargo, muchos investigadores han especulado sobre los posibles temas que pudieron tratar, para algunos, el Papa habría tenido un gran interés por conocer los motivos que propiciaron a Alí Agca ha llevar tal acto, según estiman estos investigadores, la idea de que el atentado estaría vinculado con el Tercer Secreto de Fátima, era algo que provocó en el Papa tal interés.

Otros, señalaban que Juan Pablo II quería como es lógico, conocer la identidad de los autores intelectuales del crimen, esto se desprende porque en el libro “Memoria e Identidad” el Santo Padre asegura que Agca “no era más que un asesino a sueldo”, desechando así las teorías que sugerían que el turco habría actuado por iniciativa propia.

Justamente, los nombres y los países involucrados en este atentado internacional estaría en el informe escrito por Luigi Poggi.

No obstante, el Monseñor Stanislaw Dziwisz, secretario personal de Juan Pablo II en ese entonces, señaló que a Agca “sólo le interesaba el Tercer Secreto de Fátima” y las profecías vinculadas al Fin del Mundo, es más, le pidió a Juan Pablo II que le diga algo al respecto pero el padre se negó a comentarle algo señalando simplemente, que el secreto sería revelado a su debido tiempo.

martes, 11 de mayo de 2010

Adán y Eva


Adán y Eva son, según el libro del Génesis de la Torah judía como la Biblia cristiana y el Corán, los primeros seres humanos (hombre y mujer) que poblaron la tierra. Fueron hechos por Dios en el sexto día de la creación. Adán fue creado primero, y Dios, al verlo solo, decidió que necesitaba una compañera que fue creada partiendo de una costilla del hombre...
No obstante, hay otra teoría más creíble que afirma que descendemos del mono, y como éste desciende del árbol parecería que en definitiva nuestros ancestros serían vegetales…

Religión = Farsa

GRACIAS A DIOS, LA MENTIRA

TIENE PATAS CORTAS


Por primera vez en la historia de la humanidad

se revelan secretos que se mantuvieron ocultos

solamente con fines de manipulación.

En nuestro planeta difícilmente se pueda encontrar una mentira mayor que la que difunde que el origen de la Biblia es divino. Solamente la infinita, inconmensurable, ilimitada, increíble, estupidez del hombre puede haber transformado a un montón de textos al azar –escritos en diversas épocas y recopilados arbitrariamente por personas mediocres, ignorantes y muchas veces cretinas, sin perjuicio de las tergiversaciones hechas a propósito para satisfacer intereses espurios–, en la “palabra de Dios”. Las incongruencias de este supuesto libro sagrado, denominado pomposamente “La Santa Biblia”, son tan, pero tan enormes, que sorprende que se lo siga a pie juntillas, cuando a todas luces los demenciales resultados de hacerlo deberían llevar a concluir fácilmente que sólo se trata de una sarta de disparates escritos por quienes no tenían la menor noción de lo que estaban diciendo.

http://www.grupoelron.org/quees/luxxi_labiblia.htm

lunes, 10 de mayo de 2010

Los 4 Evangelios

Es bien sabido por todos que los testigos privilegiados de la vida pública deJesús fueron los apóstoles, hombres que, según lo refiere Marcos, fueron seleccionados por el Mesías de la siguiente forma: "Subió a un monte, y llamando a los que quiso (de sus discípulos), vinieron a EL, y designó a doce para que lo acompañaran y para enviarlos a predicar, con poder de expulsar a los demonios. Designó, pues, a los doce: a Simón, a quien puso por nombre Pedro; a Santiago el de Zebedeo y a Juan, hermano de Santiago, a quienes dio el nombre de Bonaergés, esto es, hijos del trueno; a Andrés y Felipe, a Bartolomé y Mateo, a Tomás y Santiago el de Alfeo, a Tadeo y Simón el Celador, y Judas Iscariote, el que le entregó" (Mc 3, 13-19).
Los apóstoles, todos ellos judíos, como el propio Jesús, vivieron tiempos difíciles y maravillosos cuando se vieron llamados a colaborar personalmente con el proyecto salvífico que el mismísimo Dios le había asignado a su hijoJesús. Debieron ser grandes personas, pero de lo que no cabe duda es de que mostraron un escasísimo interés -o más bien negligencia grave- en velar porque su valioso e irrepetible testimonio quedara plasmado sobre documentos que recordaran por siempre al mundo aquello que fue y ya no volverá a ser hasta el fin de los tiempos.
No olvidemos que en el entorno geográfico en el que sucedieron esos hechos el ser humano ya había descubierto la escritura hacía más de tres mil años. Pero de la propia mano de los apóstoles apenas salió una mota de polvo frente al casi infinito huracán de escritos que acabarían levantando el caso de Jesús, el Mesías de los Judíos.
Resulta insólito. Casi tanto como el hecho de que un hombre tan consciente de su misión, como parece haberlo sido Jesús, no dejara escrita ni una sola línea; aunque esto último podría resultar plausible si consideramos que su vida pública se redujo a un período de apenas dos años en el que, por lo que parece, debió de llevanr una actividad febril.
El teólogo católico Raimón Panikkar apunta otra posibilidad, menos plausible, pero mucho más bella, cuando dice que: "el cristianismo no es una religión del libro, sino de la Palabra, la Palabra viva, el Logos encarnado que tuvo la ironía de no dejarnos apenas rastro de sus alocuciones para que no cayéramos en la tentación de identificarlo con las frases más o menos brillantes que hubiera podido decir" (Raimón Panikkar, "El conflicto de eclesiologías: hacia un concilio de Jerusalen II" "Tiempo de Hablar" -56-57-, p. 34).
Lo primero que nos llama la atención cuando nos acercamos al Nuevo Testamento resulta lo tardíos que son sus textos -no se empezaron a componer hasta el último cuarto del Siglo I D.C. y primero del II D.C. (con excepción de las epístolas de Pablo, datadas entre el 51 y el 77 D.C.)- y lo incomprensible y absurdo que parece el hecho de que quienes sí tenían mucho que atestiguar no escribieron nada o casi nada y, por el contrario, quienes no pudieron conocer nada directamente escribieron la inmensa mayoría del canon neotestamentario. Es tan ilógico como si una docena de historiadores o periodistas presentes en el momento de producirse el mayor prodigio de la historia humana, hubiesen enmudecido totalmente y el hecho no se hubiese plasmado documentalmente ni dado a conocer hasta cuarenta años después y sólo gracias a los escritos deslavazados de un par de ayudantes de dos de esos supuestos testigos privilegiados. Veamos:
El Evangelio de Marcos es el documento más antiguo sobre la vida deJesús de cuantos se dispone, pero Marcos ni fue discípulo de Jesús ni le conoció directamente sino a través de lo que, tras la crucifixión, le oyó relatar públicamente a Pedro.
El Evangelio de Lucas y los Hechos, del mismo autor, son los documentos fundamentales para conocer el origen y desarrollo de la Iglesia primitiva, pero resulta que Lucas, que tampoco fue apóstol, también escribe de oídas, componiendo sus textos a partir de pasajes que plagia de documentos anteriores, de diversas procedencias, y de lo que le escucha a Pablo, que no sólo no fue discípulo de Jesús sino que fue un fanático y encarnizado perseguidor del cristianismo hasta el año 37 D.C. (un año después de la crucifixión de Jesús).
Mateo sí fue apóstol, pero una parte de su Evangelio lo tomó de documentos previos que habían sido elaborados por Marcos (no apóstol). Queda Juan Zebedeo, claro, que ése sí fue apóstol... pero resulta que el Evangelio de Juan y Apocalipsis no son obras de éste sino de otro Juan; fueron escritos por un tal Juan el Anciano (de Patmos), un griego cristiano que se basó en textos hebreos y esenios y en los recuerdos que obtuvo de Juan el Sacerdote, identificado como "el discípulo querido" de Jesús (que no es Juan Zebedeo), un sacerdote judío muy amigo de Jesúsque se retiró a vivir a Efeso, donde murió a edad muy avanzada.
La sustancial aportación doctrinal de las Epístolas de Pablo resulta que proviene de otro no testigo que, además, acabó imponiendo unas doctrinas que eran totalmente ajenas al mensaje original deJesús. Pedro, el jefe de los discípulos y "piedra" sobre la que se edificó la Iglesia, no escribió más que dos Epístolas de puro trámite -la segunda de las cuales es pseudoepigráfica, eso es redactada por otro- que no representan más que un 2 % de todos los textos neotestamentarios. Santiago, hermano deJesús y primer responsable de la iglesia primitiva y, por ello, un testigo inmejorable, apenas aportó otro 1 % al Nuevo Testamento con su Epístola (también de dudosa autenticidad).
En fin, resulta que la mayor parte del testimonio en favor de Jesús, eso es el 79 % del Nuevo Testamento, procede de santos varones que jamás conocieron directamente a Jesús ni los hechosy dichos que certifican.
Tamaña barbaridad y disparate intentó ser apuntalada al declarar "inspirados" todos los textos del canon neotestamentario, pero entonces, dadas las infinitas contradicciones que se dan entre los propios Evangelios y sus inexactitudes históricas injustificables, se hizo quedar como un auténtico ignorante al mismísimo espíritu de Dios. ¡Menudo problema!
Las incoherencias tremendas que cualquiera puede apreciar al comparar entre sí los cuatro evangelios canónicos, resultan tanto más chocantes y graves si tenemos en cuenta que estos textos fueron seleccionados como los mejores de entre un conjunto de alrededorde sesenta evangelios diferentes. Los textos no escogidos fueron rechazados por apócrifos (escritos dudosos, falsos o heréticos) por la Iglesia y condenados al olvido. Buena parte de los apócrifos eran más antiguos que los textos canónicos y entre los rechazados había escritos atribuídos a apóstoles y figuras tan importantes como Tomás, Pedro, Andrés, Tadeo, Bartolomé, Pablo, Matatías, Nicodemo, Santiago, María Magdalena... y textos tan influyentes en su época como el Evangelio de los Doce Apóstoles.
Los cuatro evangelios canónicos citan a menudo textos que son originales de algún apócrifo y los primeros padres de la Iglesia, como Santiago, san Clemente Romano, san Bernabé o san Pablo, incluyeron en sus escritos supuestos dichos de Jesús procedentes de apócrifos.
La selección de los evangelios canónicos se realizó en el Concilio de Nicea(325) y fue ratificada en el de Laodicea (363). El modus operandi para distinguir a los textos verdaderos de los falsos fue, según la tradición, el de la "elección milagrosa". Así se han conservado cuatro versiones para justificar la preferencia por los cuatro libros canónicos:
1) después de que los obispos rezaran mucho, los cuatro textos volaron por sí sólos hasta posarse sobre un altar;
2) se colocaron todos los evangelios en competición sobre el altar y los apócrifos cayeron al suelo mientras que los canónicos no se movieron;
3) elegidos los cuatro se pusieron sobre el altar y se conminó a Dios a que si había una sola palabra falsa en ellos cayeran al suelo, cosa que no sucedió con ninguno;
4) penetró en el recinto de Nicea, el Espíritu Santo, en forma de paloma, y posándose en el hombro de cada obispo les susurró qué evangelios eran los auténticos y cuáles los apócrifos (esta tradición evidenciaría, además, que una parte notable de los obispos presentes en el concilio eran sordos o muy descreídos, puesto que hubo una gran oposición a la elección -por votación mayoritaría que no unánime- de los cuatro textos canónicos actuales).
San Ireneo (c.130-200) aportó también un sólido razonamiento para justificar la selección de los libros canónicos cuando escribió que "el Evangelio es la columna de la Iglesia, la Iglesia está extendida por todo el mundo, el mundo tiene cuatro regiones, y conviene, por tanto, que haya también cuatro Evangelios. El Evangelio es el soplo o relato divino de la vida para los hombres, pues hay cuatro vientos cardinales, de ahí la necesidad de cuatro Evangelios. El Verbo creador del universo reina y brilla sobre los querubines, los querubines tienen cuatro formas, y he aquí que el verbo nos ha obsequiado con cuatro Evangelios."
Tamaña ciencia, tamaño absurdo.
Hoy, que sabemos que la Tierra es redonda y que no tiene los cuatro ángulos que se le adjudicaba al imaginarla plana, ¿cuántos evangelios debería obsequiarnos el Verbo para ponerse al día con el mundo actual?
Entonces, ¿qué autoridad puede tener una Iglesia que hoy dice basar su autoridad en unos evangelios dudosos que ella misma tuvo que avalar cuando ni ella ni los textos gozaban aún de autoridad alguna?

jueves, 6 de mayo de 2010







Secretos del vaticano

La muerte de Juan Pablo I
El 28 de septiembre de 1978, y tras 33 días ocupando el cago máximo de la Santa Sede, el Sumo Pontífice, Juan Pablo I, fue hallado muerto en su habitación del Vaticano. Según informaciones oficiales, el Papa Luciani habría fallecido debido a un infarto agudo de miocardio producto de una mala dosis de su medicamento, sin embargo, algunos investigadores sostienen que lejos de una muerte natural, el llamado Papa de la sonrisa, habría si objeto de un atentado gestado en los círculos más internos de la Iglesia y la mafia italiana.

Cabe destacar que el cuerpo del Papa pasó por un necropsia forense que concluyó que la muerte se había producido por la ingestión de una dosis fortísima de un vasodilatador recetado por teléfono por el doctor de cabecera, Da Ross, sin embargo, el médico rechazó prontamente tal información al aclarar que no le había recetado nada al Papa aquella noche, ni las anteriores, debido principalmente a que éste gozaba de buena salud.

Asimismo, la religiosa que encontró al Santo Padre en su lecho, Sor Vicenza, aseguró que Juan Pablo I, yacía en su cama extrañamente con el rostro calmado y en una posición de reposo, algo que no coincide con la violenta muerte que supuestamente hubiera tenido si tuviera un ataque cardíaco.

Los que apoyan esta teoría conspirativa sostienen que ni bien obtuvo el Papado, Juan Pablo I expresó su férrea voluntad realizar una reorganización general del Instituto para Obras de Religión (IOR) o Banco Vaticano, y la lucha directa en contra de la mafia y la masonería.

Los archivos referentes a la muerte del Santo Padre así como la investigación realizada en torno a ella, están guardados en estos archivos en donde ninguna persona, tan sólo el Papa de turno puede acceder.